¡Vamos, vamos, vamos! Creo que, de todos los estrenos de nuevos tipos de eventos, este ha sido, sin duda, el más sonado. Yo, que ni canto en la ducha, nunca pensé en qué me vería organizando un evento de tipo «open mic» como el que organizamos el viernes 10. Un evento musical que rompió todos los estándares que estábamos acostumbrados a gestionar.

Contextualizando un poquito: PianoMeetups nace como un proyecto para acercar a los amantes del piano a una forma mucho más orgánica y natural de entenderlo, menos virtuosista. Por este motivo, los eventos normales están centrados en piano solista en vez de en un piano que haga el acompañamiento. Si que es cierto que cada poco tiempo siempre se me acerca alguna persona preguntándome si puede cantar. Así que nos pusimos manos a la obra para crear un nuevo tipo de evento al que bautizamos como «No sólo Piano… Meetups».

El evento

El evento lo abrió uno de nuestros miembros más constantes junto con su mujer, Emilia y Jose nos hicieron disfrutar de un duo piano/flauta travesera espectacular, que a mi me dejó con ganas de mucho más. Tras la apertura con este gran duo, Oscar nos compartió un arreglo propio de un tema de Charlie Chaplin, de uno de los mayores clásicos de la historia del cine: «Tiempos Modernos».

A partir de este momento, el sesgo del evento tuvo su primer cambio, ya que tuvimos una serie de interpretaciones de piano y voz que aparte de entrañables, nos hicieron pasar un muy buen rato.

Los primeros en calentar el micrófono fueron Merche de solista, Rosa y Elena de coros y al piano nuestro queridísimo Manuel que hizo alguna de sus picardías al piano con «Tu serás mi baby». Seguidamente cambiamos de pianista pero no de solista, sentándose Nacho al piano y acompañando a Merche con un potentísimo Fly me to the moon y cediendo el micrófono a continuación a Elena, con su chorro de voz y una de mis canciones favoritas: City of stars.

Después de estas dos solitas pasamos la parte más cachonda del evento protagonizada por Almudena, Inma y Rosa que en tres actuaciones nos sacaron muchas sonrisas. Su parte comenzó con un tributo a Sinatra con el All of me liderado por el ukelele de Almudena, seguido por un solo de piano que se marcó Inma con su idolatrado Prince (bueno, justamente idolatrado) y cerrando por una performance brutal de Hey big spender .

Con el cambio de intérpretes hicimos un cambio de tercio, a algo más intimista empezando por un rasgadísimo Lagrimas negras que canto Anita con Mati al piano. Una interpretación super equilibrada en la que pudieron brillar «con justo encono» tanto la voz como el piano. A continuación Mati siguió al piano compartiendo dos sentidísimas obras al piano, la primera una canción de su infancia y cerrando con una composición propia.

Siguiendo en la misma línea, Inma se volvió a sentar al piano, en este caso, para acompañar a Marco, que sacó su cara internacional deleitándonos primero en italiano con Viglio, vederti, Danzare y cerrando con un emocionante Creep.

Tras esa interpretación tan introspectiva vino el último cambio del evento, en el cual el Coro de Almudena Cano «invadió» el escenario haciéndonos cantar y bailar por igual con su repertorio. Para mi, el momento que subió el coro fue cuando cambio el evento, ya que el coro no necesitaba apoyo técnico y pude dedicarme a disfrutar del evento. Que pude hacer desde el final del auditorio y que flipé, ya no solo por la calidad y la variedad de las interpretaciones del coro, sino por como lo estaba disfrutando el público.

Para cerrar el evento, quisimos que cantara todo el auditorio y tuvimos a un espectacular Nacho con el Hallelujah de Cohen y un pasable intento de A quien le importa por mi parte (que lo salvo el coro y el público) .

Los eventos de Madrid PianoMeetups son un punto de encuentro entre amantes de la música, y aunque el evento «oficial» tuvo su punto y final en ese momento, para nosotros solo había sido la primera parte. Todos los intérpretes y publico que quisieron continuamos la velada en el restaurante y, tras reponer fuerzas y energía, seguimos cantando y disfrutando de la música hasta que nos cerraron el restaurante.

Un pensamiento final

A nivel de organización, como siempre es mejorable, sin embargo, mi reflexión no va por ese lado. Lo que ocurrió en este evento fue algo muy especial, casi mágico. Estamos acostumbrados a escuchar musica ultra producida, con cantantes y músicos profesionales que emplean medios y tecnologías de vanguardia para transmitir una experiencia musical muy concreta. Fuimos casi antagónicos con ese tipo de entendimiento de música: el ambiente, sentimiento y alcance que cada uno de los interpretes compartió con el resto de los que estábamos allí generó un evento único donde el corazón y la «desnudez» que ofrece una música sin artificios nos trasladó a un mundo muy especial.

No puedo estar más orgulloso y complacido de haber formado parte de un evento musical con toda la música en vivo. Y quiero dar un agradecimiento especial a todos los intérpretes por colaborar y a las personas que han hecho posible que este evento haya ocurrido: Carlos por sus consejos técnicos, Rosa y Manuel por aguantarme y traccionar y a Javier y Adrián por hacer posible que el coro estuviese con nosotros.

Canciones

Por orden de primera interpretación.

Resumen del evento